Acabo de ver la película "EL PRÍNCIPE DE LAS MAREAS", siempre que la veo lloro y me apasiona, tiene todos los componentes para ensimismarme, termino reflexionando sobre lo importante que es nuestra familia, donde crecemos, donde nos formamos y aprendemos a querer, a relacionarnos, a vernos a nosotros mismos.
Por eso cuando no reflexionas acabas huyendo sin rumbo, te da miedo enfrentarte a tu destino y sobre todo a la verdad, huimos sin dirección, hacia delante sin final, corriendo, andando o bailando eso da igual, el caso que huimos,casi nunca nos gusta profundizar en las conversaciones, no nos gusta abrirnos a los demás tal como somos, no nos gusta la verdad, la sinceridad nos incomoda. Huir no es la solución tampoco ocultar, la respuesta no la tengo yo pero lo que si puedo decir que la vida es mas que un escaparate donde solamente exibimos lo bonito, nuestra vida también es una tienda donde se enseña todo lo que tenemos y una trastienda donde se guarda lo menos bonito pero no por eso menos valioso. Somos todo en conjunto, lo serio , lo profundo, también lo trivial, lo simple, lo mas divertido, la juerga , los amores, los amigos, las noches locas, la bebida moderada, el trabajo que nos cansa, las conversaciones sencillas, la gente menos intima, todo y cada uno de los momentos son importantes para configurar eso que llamamos vida.
Dejemos de huir, dejemos de no saber a donde vamos, paremos y disfrutemos de todo intensamente como si fuera la ultima vez, la ultima oportunidad. Que nunca tengamos que pensar porque no lo hice porque no me atreví o porque me dio miedo arriesgarme y experimentar algo diferente.
Enfrentémonos a los fantasmas del pasado, no huyamos de ellos porque nos dan miedo, nos producen pesadillas, hablemos con ellos y preguntemos que quieren y cuando se van a ir.
Seamos capaces de entender nuestro pasado para disfrutar nuestro presente y encaminarnos felices y satisfechos al futuro.
Seamos valientes poniendo nombre a todo aquello que no nos gusta, a todo lo que nos ha hecho o nos hace sufrir, seamos capaces de ver nuestro reflejo en aquello que nos disgusta para ser mas conscientes de como no queremos ser.
No mas huidas, no mas carreras sin final, no mas.
Sed felices, y capaces de buscaros.
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