La mentira se ha impuesto, mentimos sin
ningún pudor, algunas veces por lo políticamente correcto, otras
por consideración y muchas otras por justificación, y no olvidemos
la mentira como manipulación. La sinceridad es un valor en desuso,
habitualmente se considera a la sinceridad como algo nefasto, irrespetuoso,ofensivo, insultante.
Decir lo que pensamos, lo que sentimos supone en infinidad de ocasiones discusiones, enfados y malos rollos. ¿ por qué?, supongo que no gusta escuchar la verdad, aunque
sea la de otro, somos incapaces de escuchar con sentido crítico,
valorando las infinidades de posibilidades que nos brindan los
comentarios ajenos, que nos alejan de nuestras autojustificaciones,
que nos limitan y enquistan.
El valor moral de la mentira no voy a cuestionarlo, simplemente diré que estoy en contra en cualquier circunstancia, situación o posibilidad, el mentir hace daño a la
larga, oculta intencionadamente y sobre todo subestima a la persona a
la que se le dice la mentira, y no voy a comentar la mentira como
manipulación porque para mí es lo más deleznable que se puede
hacer hacia otro semejante porque eso supone considerarlo tonto,
idiota, menospreciarlo como igual.
Ser sincero contigo mismo es más que
decir tu verdad, es ser sincero en tus actos, en tus opiniones y en
tus valores, antes que mentir es mejor callar, aun teniendo que
morderse la lengua.
El lenguaje no verbal ha sabido
descifrar las señales que nos advierten cuando alguien miente, pero
son tan sutiles que si no estas en absoluta concentración no eres
capaz de verlas y menos cuando estás interactuando en ese momento
con la persona en una discusión acalorada.
Y no olvidemos a las personas que
mienten sistemáticamente y no conformándose con ello también
vierten calumnias sobre otras personas por envidia, odio, rencor,
intereses económicos u otras razones varias. Pero aún así seguimos
consintiendo y escuchando a estas personas, por llamarlas de alguna
forma,¿ pero quien tiene más delito el que lo hace o el que lo
consiente?, que responda cada uno en su juicio y valor ético.
Según me hago más mayor entiendo
menos la mentira, la consiento menos y sobre todo la aparto todo lo
que puedo de mi vida, no consintiendo a quien la dice y menos a quien
sabiendo certeramente que la dice, escucharla.
Enseñar es trasmitir valores que nos
mejoren, que nos dignifiquen como especie, perpetuar lo que hemos
sido capaces de evolucionar y no involucionar mintiendo u ocultando
verdades.
Aclaro, ser sinceros no es ofender
vertiéndola de forma brusca o malintencionada, ser sincero puede
hacerse de manera respetuosa y sin dañar .
En los momentos que vivimos, convulsos,
repletos de acontecimientos llenos de violencia, de miedo, de odio,
de guerras donde los gobiernos nos mienten manipulándonos, nos
ocultan las verdades pensando que no somos capaces de entender, nos
cuentan milongas para creer lo que queremos creer, suponemos que
ellos saben más y les concedemos ya no sólo el beneplácito de
nuestros pensamientos sino el poder de decidir por nosotros sin
nuestra supervisión o consentimiento alimentándolos para ser
terroristas, asesinos, abusones del poder, ladrones y mentirosos
maliciosos sin límites. Y no conformándonos con esto trasladamos la
mentira a nuestra vida diaria para justificarnos y justificar hechos
que en otras personas condenamos y perseguimos.
Seamos coherentes y aprovechemos la
vida para ser sinceros con nosotros mismos y con los otros.
Cuando la experimentes y te des cuenta
que no pasa nada, que todo sigue igual pero con una gran diferencia,
cuando eres sincero no te engañas y por lo tanto no engañas a
otros.
¡Pruebalo!
ningún pudor, algunas veces por lo políticamente correcto, otras
por consideración y muchas otras por justificación, y no olvidemos
la mentira como manipulación. La sinceridad es un valor en desuso,
habitualmente se considera a la sinceridad como algo nefasto, irrespetuoso,ofensivo, insultante.
Decir lo que pensamos, lo que sentimos supone en infinidad de ocasiones discusiones, enfados y malos rollos. ¿ por qué?, supongo que no gusta escuchar la verdad, aunque
sea la de otro, somos incapaces de escuchar con sentido crítico,
valorando las infinidades de posibilidades que nos brindan los
comentarios ajenos, que nos alejan de nuestras autojustificaciones,
que nos limitan y enquistan.
El valor moral de la mentira no voy a cuestionarlo, simplemente diré que estoy en contra en cualquier circunstancia, situación o posibilidad, el mentir hace daño a la
larga, oculta intencionadamente y sobre todo subestima a la persona a
la que se le dice la mentira, y no voy a comentar la mentira como
manipulación porque para mí es lo más deleznable que se puede
hacer hacia otro semejante porque eso supone considerarlo tonto,
idiota, menospreciarlo como igual.
Ser sincero contigo mismo es más que
decir tu verdad, es ser sincero en tus actos, en tus opiniones y en
tus valores, antes que mentir es mejor callar, aun teniendo que
morderse la lengua.
El lenguaje no verbal ha sabido
descifrar las señales que nos advierten cuando alguien miente, pero
son tan sutiles que si no estas en absoluta concentración no eres
capaz de verlas y menos cuando estás interactuando en ese momento
con la persona en una discusión acalorada.
Y no olvidemos a las personas que
mienten sistemáticamente y no conformándose con ello también
vierten calumnias sobre otras personas por envidia, odio, rencor,
intereses económicos u otras razones varias. Pero aún así seguimos
consintiendo y escuchando a estas personas, por llamarlas de alguna
forma,¿ pero quien tiene más delito el que lo hace o el que lo
consiente?, que responda cada uno en su juicio y valor ético.
Según me hago más mayor entiendo
menos la mentira, la consiento menos y sobre todo la aparto todo lo
que puedo de mi vida, no consintiendo a quien la dice y menos a quien
sabiendo certeramente que la dice, escucharla.
Enseñar es trasmitir valores que nos
mejoren, que nos dignifiquen como especie, perpetuar lo que hemos
sido capaces de evolucionar y no involucionar mintiendo u ocultando
verdades.
Aclaro, ser sinceros no es ofender
vertiéndola de forma brusca o malintencionada, ser sincero puede
hacerse de manera respetuosa y sin dañar .
En los momentos que vivimos, convulsos,
repletos de acontecimientos llenos de violencia, de miedo, de odio,
de guerras donde los gobiernos nos mienten manipulándonos, nos
ocultan las verdades pensando que no somos capaces de entender, nos
cuentan milongas para creer lo que queremos creer, suponemos que
ellos saben más y les concedemos ya no sólo el beneplácito de
nuestros pensamientos sino el poder de decidir por nosotros sin
nuestra supervisión o consentimiento alimentándolos para ser
terroristas, asesinos, abusones del poder, ladrones y mentirosos
maliciosos sin límites. Y no conformándonos con esto trasladamos la
mentira a nuestra vida diaria para justificarnos y justificar hechos
que en otras personas condenamos y perseguimos.
Seamos coherentes y aprovechemos la
vida para ser sinceros con nosotros mismos y con los otros.
Cuando la experimentes y te des cuenta
que no pasa nada, que todo sigue igual pero con una gran diferencia,
cuando eres sincero no te engañas y por lo tanto no engañas a
otros.
¡Pruebalo!
AC querida amiga el mentir es un arte , mentiras piadosas o mentiras gordas van todas encaminadas al mismo fin el de confundir y hacer que transgiverses la realidad pero que seria nuestro mundo sin una buena mentira dicha en plan romantico ?????.....esto ultimo es con doble moral ( solo mira a nuestros politicos se quieren y sin embargo en publico se humillan )
ResponderEliminarun besazo amiga
Y es mas, yo le añadiría a Hawai que "Los más rezan con los mismos labios que usan para mentir."
ResponderEliminarun saludo Ac
cuando uno es capaz de decir su opinión aún sabiendo que es contraria al auditorio, cuando dejas hablar a tu interior y eres pues una sola voz (interna-externa).. experimentas una gran sensación de respeto hacia ti mismo.
ResponderEliminarHoy en día creo que hay una gran confusión de valores y objetivos por lo que la mentira se admite popularmente como medio para dicho objetivo.
A mi también me repùgna el que escucha y comparte algo a sabiendas de que es mentira.
BESOS AMIGA !!!
Hola Autoconocimiento
ResponderEliminarCuando mentimos, no lo hacemos a los demás, nos estamos negando ser sinceros con nosotros mismos y eso si es negativo. Comparto tu manera de pensar.
Es cierto que en muchos momentos, cuesta ser sincero por miedo al que dirán, porque no nos van a entender o por las circunstancias que nos rodean.
Intentemos ser sinceros con nosotros y lo seremos con los demás.
Besotes.
para mi es muy importante siempre decir la verdad, duela o no duela, pues la mentira tiene las patas muy cortas.
ResponderEliminarNo se puede engañar a nadie pues con ello te estas engañando a ti mismo.
Besinos de esta amiga admiradora que te da infinitas gracias por hacernos participes de tus bellas y profundas letras.